Te voy a pedir que no llames,
Ya no me hables, ni mucho menos que intentes verme.
Hoy te pido pausa, hoy yo digo hasta nunca.
Te voy a pedir que no vuelvas a implorar por un beso,
Ni pidas rozar mi piel con la tuya.
Hoy digo basta, freno mi mundo.
Quien sos? Quien eras? Quien fuiste alguna vez? A donde haz de ir?
Pido que no respondas, ni busques mi escencia.
Cada palabra tuya de amor esconde una desilusión a su paso.
Eras mi apoyo, eras mi sosten,
Eras mi felicidad.
Vos buscaste cambiar, vos cambiaste ausencia por libertad.
Espero que nunca te arrepientas para cuando ya no esté.
Cuando he de irme, será porque ya no pueda pagar el precio que ninguna ilusion busque sustentar.
Te pido perdon porque fallaré a la palabra de siempre estar contigo a donde vayas,
Pero entiende que algún día tendras que recibir un poco de todo lo que repartiste.
Nadie ha de irse sin pagar lo que debe.
Ni risa, ni dolor, no existe que te haga inmutar.
Quitate la mascara y dejame conocerte que un espejismo no se ama.
Si algún día se te inventa extrañarme,
recuerda que siempre te amé con el alma
Te vivi con el corazón
Te sufri con la piel
Te despedi con dolor, pero que conservo el adios en la incertidumbre.
Y si he de olvidarte, será por desilusión.
No hay nada que en tu poder no seas capáz de cambiar.
Quizas no lo pudiste ver, tenias otras prioridades,
Si todavía conservas coraje, no intentes justificar con errores ajenos,
Intenta hacerte cargo de las heridas que ocacionaste.
Espero que conserves la memoria de lo que vivimos,
Yo lo haré mientras el tiempo me lo permita, por respeto a lo que te he de amar.
Tengo la esperanza de que ningún resentimiento haga valer la felicidad que algún día resignaron por ti.
Espero que poseas el valor de aceptar lo que accionaste por propia voluntad.
Dichosa aquella que se gane tu humildad,
Dichosa aquella que se gane tu sufrimiento,
Dichosa aquella que ha de permitir sentir dolor y amor,
Dichosa aquella que haga extraviar tus prioridades.
Admiro la cantidad de amor que pueda entregarte
Que vulnere tu coraza.
Si algún día haz de sentir una vez mas,
conservo la ilusion de que te amen aun mas que yo.
No pierdas la oportunidad de desprender lo que en tu mente se cruza o en tu corazón late,
Lo que guardes, dentro muere como si nunca hubiera existido.
Ten el coraje suficiente de darle valor a lo que te sostenga vivo.
No quiero vivir paranoica,
No quiero ya verme tan triste,
No busco asuntos que quemen,
Tengo bastante que dar en el corazón y no hay tiempo excento,
Mi alegria no la he de negociar.
No quiero vivir con odio,
No intento sentir depresión.
Busco el placer de estar viva
Aunque decepción sea su precio.
No perpetres la desilusión, ni desgastes lo que ya no existe,
Observa la luna, ya cansada de por las noches soñar con contemplar la luz de sol,
Que solo desgasta las pocas fuerzas que aun le quedan para brillar.
No intentes que una pena mate mi esperanza,
No quiero agonias que en el corazón,
han de retraer mi deseo de vivir.
Por mi.